La embriaguez de las Ménades, por Abel Martí Belda
Rito coreo_performático que pretende liberarse de tabúes y estigmas sociales.
A las Ménades se las conocía por «las que desvarían», mujeres en estado salvaje y con un culto orgiástico hacia Dionisio.
Esta es una acción coreo_performática inspirada en las Ménades de la mitología griega.
Las Ménades eran ninfas que se encargaron de la crianza del dios Baco y que posteriormente fueron poseídas por él, otorgándoles una locura mística cargada de un frenesí extático en el que se permitían dosis importantes de violencia, borrachera, sexo, derramamiento de sangre y mutilación.
La embriaguez de las Ménades se refleja a través de un rito dancístico que pretende liberarse de tabúes sociales que provienen de lo rechazado, de los deseos y de las necesidades humanas.
Este es un viaje hacia la concienciación de pensamientos y emociones que convertimos en parte de nuestra vida y los dotamos de importancia y poder, aunque sean irrelevantes y carentes de valor.